domingo, 11 de marzo de 2007

CRÓNICA 11-03-07 (1)

En el día de hoy, es decir el posterior al de ayer me he decidido a salir con la BTT por varios motivos: para disfrutar del alegre canto de los pajarillos, del suaver olor de las florecillas, pero sobre todo por la alegre compañía del Triki Bocarrana. Ayer es decir, el día anterior al de hoy y el posterior al de anteayer, también hubo jornada BTT-Tubular Extrem, en la que el Triki se troncho un tobillo, el Revoltero perdio unas gafas y un servidor se calzo una hostia muy maja, que agudizo mi "Acidosis GAlopante con Anonismo". Espero los sabios consejos de la Doctora Kalandrakas para superar tan terrible dolencia.

Tubulares por Zaragoza.
En el Bostón faltaban los corredores élite y el pelotón de bomberos toreros, lo que nos ha provocado un profundo desasosiego, posteriormente nos hemos acordado que se han ido a disputar una carrera a Navarra, tierra de insignes ciclistas, tales como Prudencio Indurain y de afamados cantautores, como el Señor Tomás, autor de nuestro himno Tubular y padre adoptivo en lo profesional del Agustinico. Había otras destacadas ausencias, faltaban los hermanos Charcuter, Antonio Cagolin con su bicicleta-salchicha y su apenada esposa, por lo cualo, el grupo basura encontrabase bajo mínimos. El Agustinico no estaba pero al final ha llegado tarde, que raro, y destacar que José Pokemon ha venido en plan machote, con manguitos y sin guantes.
Los corredores han podido disfrutar de la compañía del Triki y de un servidor solamente hasta el Parque Grande, en este punto tras un sincero y mutuo “anda y que os den mucho por culo” nos hemos separado de los carreteros con la misma pena que produce apartarte de esas ladillas que ya formaban parte de tu intimidad y de tu ser.

En este punto el destino nos separo.

En un principio hemos decidido ir hacia Valmadrid pero, al cabo de estar ciclando una hora de reloj, nos hemos dado cuenta, que listos somos, de que por ese camino íbamos a llegar a Valmadrid pero por los cojones, así que la Expedición Malaespina ha tenido que cambiar de objetivo. Total que hemos decidido subir a Las Planas, por unas trialeras, pasando por el Barranco del Montañes y de paso comprobar si hacía mucho aire arriba, para de paso confirmar el efecto “Guinchi”, otro día desarrollare tan complejo teorema que trae en ascuas a los más afamados científicos y matarifes.
Las primeras cuestas han puesto en evidencia nuestras limitaciones y hemos tenido que subir al ritmo del Milikito.

Antes de empezar las trialeras.

La zona “trécnica” la hemos superado con más pena que gloria, pero en esta ocasión, sorpresa, no nos hemos caido y hemos llegado arriba sin apositos y sin tener que utilizar el metadine.

El Triki con cara de pez

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esto ya no es para afotos, que mierda a escribir al periodico coño esro es pa afotos y no pa jautadas